Pendón o bandera del reino de Murcia.

El adelantado mayor de Murcia o adelantado mayor del reino de Murcia era un oficial de alto rango al servicio de la Corona de Castilla que tenía encomendadas algunas competencias judiciales y militares en el reino de Murcia.

Historia

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Retrato imaginario de Alfonso X de Castilla. José María Rodríguez de Losada. (Ayuntamiento de León).

Lamingueiro Fernández señaló que ya desde los siglos X y XI los monarcas leoneses intentaron hacer que su presencia fuera efectiva en todos los lugares de su jurisdicción, por lo que se vieron obligados a llevar a cabo una política particular en cada uno de ellos, y de ese modo aparecieron las merindades mayores y menores, las tenencias, los alfoces y posteriormente, a mediados del siglo XIII, los adelantamientos.[1]

En el reinado de Fernando III de Castilla ya estaban plenamente definidas las jurisdicciones de los merinos mayores y menores, y Lamingueiro Fernández señaló que los primeros eran oficiales de la Corona de alto rango, con extensas competencias jurídico administrativas, y con poderes recibidos directamente del rey.[1]​ Y fue también el rey Fernando III quien designó merinos mayores para el reino de Castilla y posteriormente para los de León, Galicia y Murcia.[1]​ Y hay constancia de que al menos desde mayo de 1251 ya era merino mayor de Murcia Garcí Suárez,[2]​ y de que desempeñó el cargo aproximadamente hasta julio de 1258, cuando su nombre dejó de aparecer en la documentación acompañado de ese título.[3]

A la muerte de Fernando III, su hijo y heredero, Alfonso X de Castilla, mantuvo la misma división administrativa que había existido en el reinado de su padre, y de ese modo todos sus territorios continuaron divididos en cuatro merindades mayores, aunque en 1253 se creó el adelantamiento mayor de la frontera para los reinos de Jaén, Córdoba y Sevilla, que estaban situados junto al reino nazarí de Granada,[1]​ y en 1258 los merinos mayores de León, Castilla y Murcia fueron reemplazados por adelantados mayores.[4]​ Y cinco años después, en 1263, Alfonso X también nombró un adelantado mayor de Galicia para reemplazar al merino mayor de ese territorio.[1]

Además, el célebre escritor y magnate Don Juan Manuel, que era nieto del rey Fernando III de Castilla y llegaría a ser adelantado mayor del reino de Murcia y también de la frontera de Andalucía, llegó a afirmar en su Libro de los estados y por medio de su padre, el infante Manuel de Castilla, que:[5]

Señor infante, todo esto que vos yo digo en razón de los Adelantados, debedes entender eso mismo de los Merinos, ca eso mismo es lo uno lo al, et non ha otro departimiento, sinón que en algunas tierras llaman Adelantados et en otra Merinos...

Sin embargo, a finales del siglo XV el cargo de adelantado mayor de Murcia fue despojado completamente de sus funciones y pasó a ser un título hereditario en manos de los descendientes de la familia Fajardo, como señaló Braulio Vázquez Campos.[6]

Adelantados mayores del reino de Murcia

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Reinado de Alfonso X de Castilla (1252-1284)

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Sepulcro del infante Fernando de la Cerda. (Monasterio de las Huelgas de Burgos).

Reinado de Sancho IV de Castilla (1284-1295)

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Retrato imaginario del rey Sancho IV de Castilla. José María Rodríguez de Losada. (Ayuntamiento de León).

Reinado de Fernando IV de Castilla (1295-1312)

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María de Molina presenta a su hijo Fernando IV en las Cortes de Valladolid de 1295. Óleo sobre lienzo de Antonio Gisbert Pérez. 1863. (Congreso de los Diputados de España).

Reinado de Alfonso XI de Castilla (1312-1350)

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Últimos momentos de Fernando IV el Emplazado. Óleo sobre lienzo de José Casado del Alisal. 1860. (Palacio del Senado de España).

Reinado de Pedro I de Castilla (1350-1369)

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Gran dobla o dobla de a diez de Pedro I de Castilla, hijo y sucesor del rey Alfonso XI, acuñada en Sevilla en 1360. (M.A.N., Madrid).

Reinado de Enrique II de Castilla (1369-1379)

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Retrato imaginario de Enrique II de Castilla. José María Rodríguez de Losada. (Ayuntamiento de León).

Reinado de Juan I de Castilla (1379-1390)

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Retrato imaginario de Juan I de Castilla. Vicente Arbiol. 1848. (Congreso de los Diputados de España).

Reinado de Enrique III de Castilla (1390-1406)

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Reinado de Juan II de Castilla (1406-1454)

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Retrato imaginario de Juan II de Castilla. José María Rodríguez de Losada. (Ayuntamiento de León).

Reinado de Enrique IV de Castilla (1454-1474)

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Reinado de Isabel I de Castilla (1474-1506)

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Véase también

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Notas

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  1. Carlos de Ayala Martínez señaló que Juan Osórez fue maestre de la Orden de Santiago entre los años 1293 y 1310, pero Braulio Vázquez Campos aseguró que ya lo era desde finales de 1292. Cfr. Vázquez Campos (2006), p. 221.
  2. Pedro Martínez Calvillo era vasallo de Don Juan Manuel, le sirvió en numerosas misiones, y poseía numerosas propiedades en el reino de Murcia. Y también hay constancia de que fue procurador por la ciudad de Murcia en las Cortes de Palencia de 1313 y en las de Valladolid de 1322 y 1325. Y el día 4 de septiembre de 1318 el rey Alfonso XI de Castilla le concedió autorización para que fundara un mayorazgo en Alguazas de Cotillas. Cfr. Vázquez Campos (2008), pp. 159-163.
  3. Hay constancia de que en septiembre de 1309 Sancho Sánchez de Larriega ejercía el cargo de adelantado mayor en nombre de Pedro López de Ayala, quien a su vez lo hacía en nombre de Don Juan Manuel, ya que así consta en un documento emitido en la ciudad de Valladolid el día 12 de septiembre de 1309. Sin embargo, Braulio Vázquez Campos señaló que tal vez la fecha del documento era errónea, ya que de ser cierta el documento probablemente habría debido ser otorgado en Algeciras, que fue asediada por las tropas de Fernando IV de Castilla en esa época. Cfr. Vázquez Campos (2008), pp. 182 y 317.
  4. Juan García de Loaysa, señor de Petrel, posiblemente era hijo de García Jofré de Loaysa, que fue adelantado mayor de Murcia en el reinado de Sancho IV de Castilla. Y a finales de 1326, según consta en un documento, Gil de Moncada era teniente de adelantado en nombre de Juan García de Loaysa, que a su vez lo era en nombre de Don Juan Manuel. Cfr. Vázquez Campos (2008), pp. 229-234.
  5. Se desconoce la fecha exacta de la defunción de Pedro López de Ayala, y el último documento en el que se le menciona data del 10 de junio de 1333, y en él Alfonso XI le ordenaba que liberara a un musulmán de Vélez que había capturado. Cfr. Vázquez Campos (2008), p. 247.
  6. En el capítulo XLVII de la Gran Crónica de Alfonso XI consta que un individuo llamado Alfonso Fernández de Saavedra era alcalde mayor de Sevilla y que en 1324 fue expulsado de dicha ciudad junto con los partidarios del infante Felipe de Castilla, que era uno de los tutores del rey Alfonso XI. Cfr. Catalán (1977), p. 366.
  7. Vázquez Campos afirmó que se desconoce exactamente quién fue Día Sánchez de Biedma, aunque sí señaló que cabe la posibilidad de que hubiera sido uno de los nobles que suscribió la fundación de la Hermandad General de Andalucía a finales de agosto de 1319, ya que uno de los firmantes tenía ese mismo nombre. Y también conviene señalar que Día Sánchez de Biedma, según Gonzalo Argote de Molina, era hijo de Rodrigo Íñiguez de Biedma, señor de Estibiel y alcaide de los alcázares de Jaén, y de Juana Díaz de Funes. Cfr. Vázquez Campos (2008), pp. 273-274.
  8. Luis Vicente Díaz Martín señaló que a Martín Díaz de Albarracín debía tomarle juramento el alcalde del adelantamiento mayor de Murcia, Juan Rodríguez de Valladolid, que según consta en los documentos de la época ejerció este cargo al menos hasta el día 4 de diciembre de 1353. Cfr. Díaz Martín (1987), p. 33.
  9. El cronista Pero López de Ayala afirmó que maestre Pablo, que era el físico particular del infante Fernando de Aragón, hijo de Alfonso IV de Aragón, envenenó a Juan Alfonso de Alburquerque por orden de Pedro I en Medina del Campo. Pero Luis Vicente Díaz Martín señaló que el rey se hallaba en Tordesillas cuando se produjo la muerte de su antiguo valido, y que difícilmente podría haber ordenado a ese físico hacer tal cosa. Y al mismo tiempo afirmó que probablemente sería el infante Fernando quien ordenara a su físico que envenenara a Alburquerque, ya que en esos momentos él era el legítimo heredero del trono castellano al ser hijo de la reina Leonor de Castilla y nieto de Fernando IV de Castilla. Cfr. Díaz Martín (2007), pp. 116-117.
  10. A finales de 1353, y poco después de que el lugarteniente del adelantamiento mayor de Murcia, Ruy Díaz Cabeza de Vaca, fuera reemplazado por Juan Fernández de Orozco, aparece en los documentos de la época con el título de adelantado Juan Fernández de Valladolid, aunque Luis Vicente Díaz Martín señaló que posiblemente sólo fue un «sustituto temporal» con poderes para ejercer el cargo hasta que Juan Fernández de Orozco lo asumiera. Y el mismo historiador también indicó que Juan Fernández de Valladolid también figura como adelantado y como capitán mayor de la guerra en todo el reino de Murcia en 1357, que se encontraba en la zona fronteriza, ya que hay constancia de que en esos momentos Pedro I le ordenó, por su condición de adelantado, que los regidores del concejo murciano prestaran juramento ante él. Cfr. Díaz Martín (1987), p. 34.
  11. El padre de Juan, Gonzalo Chacón, fue uno de los nobles más destacados en el reinado de los Reyes Católicos, y era hijo de Juan González Chacón, alguacil mayor del maestrazgo de la Orden de Santiago y comendador de Montijo en la misma, y de Inés Martínez del Castillo. Y llegó a ser señor de Casarrubios del Monte y Arroyomolinos, mayordomo, maestresala y guarda mayor de la reina Isabel I de Castilla, comendador de Montiel y Caravaca y Trece de la Orden de Santiago, contador mayor de Castilla, y alcaide de los Alcázares de la ciudad de Segovia. Cfr. Salazar y Acha (2000), pp. 397 y 556.

Referencias

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  1. a b c d e Lamingueiro Fernández, 2006, p. 137.
  2. Vázquez Campos, 2008, p. 25.
  3. Vázquez Campos, 2008, p. 27.
  4. Vázquez Campos, 2008, p. 22.
  5. Lamingueiro Fernández, 2006, pp. 137-138.
  6. Vázquez Campos, 2008, p. 342.
  7. Serrano, 1934, p. 141.
  8. a b Moxó et al, 1969, p. 83.
  9. Álvarez Borge, 2008, p. 649.
  10. Salazar y Acha, 2000, pp. 376-377.
  11. Vázquez Campos, 2008, pp. 35-36.
  12. Moxó et al, 1969, p. 81.
  13. Salazar y Acha, 2000, p. 377.
  14. Álvarez Borge, 2008, p. 678.
  15. Serrano, 1934, pp. 140-141.
  16. a b Vázquez Campos, 2008, p. 315.
  17. a b Salazar y Acha, 2000, p. 376.
  18. Vázquez Campos, 2008, p. 53.
  19. Vázquez Campos, 2008, p. 55.
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  22. Vázquez Campos, 2008, pp. 50-51.
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  24. Vázquez Campos, 2008, pp. 66-69.
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  136. a b Valdeón Baruque, 1996, pp. 101 y 224.
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  157. Torres Fontes, 1978, pp. 125-126.
  158. Bernal Peña, 2011, p. 66.
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  161. Torres Fontes, 1976, p. 25.
  162. Salazar y Acha, 2000, pp. 450 y 483.
  163. Salazar y Acha, 2000, p. 450.
  164. Suárez Fernández, 1998, pp. 59 y 64.
  165. Suárez Fernández, 1998, p. 68.
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  167. Torres Fontes, 1971, p. 76.
  168. Suárez Fernández, 1998, pp. 58 y 78-79.
  169. Torres Fontes, 1978, p. 127.
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  171. Torres Fontes, 1978, pp. 127, 131 y 137.
  172. Torres Fontes, 1978, pp. 134-135.
  173. Torres Fontes, 1978, pp. 138 y 161.
  174. Franco Silva, 1994, pp. 15-16.
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Bibliografía

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