Se llama cataviento a un pedazo de hilo de velas que dispone de unas ruedecitas de corcho de trecho en trecho, coronadas o circuidas de plumas. Fijo por un extremo en una astita manual colocada en la borda de barlovento del alcázar, señala la dirección del viento. Antiguamente se llamaba penel.

Expresiones relacionadas